Se pronuncia “el pan”. Si, quizás el nombre sea un poco raro, pero los panes y otros goodies que prepara Luvina Quemain no lo son. Lo que también es inusual, es la historia de como llegó a concretarse esta pequeña panadería de masa madre en la colonia Roma.

Luvina, o Luvi para los amigos, estudió derecho y ejerció durante muchos años, con especialidad en las regulaciones que rigen las denominaciones de origen de México. Dedicarse a la cocina jamás pasó por su cabeza… hasta que un día, para conocer más a fondo como eran los productos con indicación geográfica y los procesos detrás de ellos, se lanzó a España a un curso de panadería, y ahí cambio todo.

Poco a poco, el pan de masa madre se fue apoderando de su vida; comenzó con pequeños cursos y especialidades, hasta terminar estudiando dos años en Corbuse. Al principio eran solo amigos que le pedían el pan de caja que hacia en su casa. Luego fueron chefs. Luego fueron influencers foodies, y así fue creciendo. Después de aventurarse en sociedad a una pizzería y un restaurante que hoy ya no existen, Luvi finalmente abrió las puertas de LPan (Luvina Pan, de ahí el nombre) a finales de septiembre, al frente de una casona en Jalapa 39, en la Roma Norte.

En LPan la especialidad definitivamente son el pan de caja y los panes de masa hojaldrada o viennoiserie, como los croissants, chocolatines o rollos rellenos. Cada pieza es grande, generosa, y en mi preferencia personal, el punto perfecto entre crocante por fuera y esponjoso por dentro. Hay quienes prefieren el croissant más panoso o quienes lo prefieren más crujiente. Para mí, un 50-50 es la textura ideal, como los de aquí. En cuanto al pan salado, el pan de caja integral es y será siempre el pan icónico de Luvi, con el que comenzó su negocio y con el que sigue. Además, también encontrarás hogazas de distintos tipos, desde natural hasta tricolor, de matcha y cúrcuma.

Esto es la panadería…pero LPan ha evolucionado en los pocos meses que ha existido. Los comensales empezaron a pedir desayunos, así que se inauguró el menú Brunch All Day, con platillos como pan francés, croque madame, o focaccia rellena de roast beef. Los puedes pedir a cualquier hora del día, y complementarlos con alguno de los (varios) vinos que Luvina, con sus conocimientos y experiencia en denominación de origen ha seleccionado para la carta, rotándolos constantemente para darle oportunidad a los clientes de descubrir algo nuevo.

Lo más reciente, sin embargo, son los cursos y talleres que puedes tomar en LPan. Si bien al llegar el espacio te puede confundir (¿Es un bar? ¿Un taller? ¿Una panadería? ¿Una cocina?), es porque más que parecer una panadería clásica, parece una cocina moderna pero acogedora de una casa muy grande, cuya dueña es una muy apasionada entusiasta del pan. Es en este salón donde puedes tomar cursos con Luvi de todo tipo: de pan de muerto, de conchas, de masa de pizzas, de maridaje de pan con vinos, de pan de caja… incluso si no existe el curso que quieres, seguramente Luvi lo puede crear para ti y tus amigos, ya que la barra central es como mejor se disfruta: cocinando con un buen grupo de amigos que comparten el gusto por el buen pan y por una nueva experiencia.

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