
Tips para sacarle provecho a las semillas y frutas secas

Casi en todas las alacenas encontramos arrinconadas un par de bolsas con frutas secas, ya sea que nos hayan regalado en la temporada navideña, o que simplemente arrumbamos por error. ¡Pero no hay que desaprovechar la riqueza de sabores y texturas que nos brindan frutos secos, semillas y nueces en la cocina! Sigue estos tips para hacerlas rendir:
- Guardar siempre por separado cada tipo de fruta y nuez o semilla
- Colocarlas en contenedores o bolsas herméticas y almacenarlas en lugares fríos: refrigerador o congelador.
- Las frutas secas se pican más fácilmente si se ponen en el congelador durante una hora.
- Se facilitará el picado si previamente se rocía con aerosol antiadherente cualquier utensilio con que se corten las frutas secas: cuchillo, procesador o tijeras.
- Para rehidratar las frutas secas, ponerlas en un recipiente, cubrirlas con agua y calentar en el microondas por 5 o 6 minutos.
- Las frutas secas rehidratadas pueden ser usadas para pays o pasteles, casi de la misma manera que si fueran frescas.
- Blanquear las almendras sumergiéndolas en agua hirviendo, retirar la piel y luego secarlas al horno.
- Preparar un pesto de la forma tradicional sustituyendo los piñones por avellanas o nueces.
- Una taza de nueces mezcladas y picadas pesan aproximadamente 120 gramos.
- Si las nueces con cáscara se empacas herméticamente y se congelan se conservarán bien durante cerca de un año.
- Para intensificar el sabor de las nueces: tostarlas ligeramente en el horno a calor medio sobre una charola de galletas y moverlas frecuentemente, o en una sartén sobre la hornilla, también moviendo constantemente hasta que estén ligeramente doradas.
- Se pueden calentar las nueces en microondas y aunque no toman calor, si desprenden su aroma. Poner una taza de nueces en un plato de cartón y calentar durante 3-4 minutos rotando a los 2 minutos.
- Para picar nueces en el procesador, no trabajar más de una taza a la vez.
- Cuidar de no sobreprocesar, pues las nueces desprenderán su aceite y se convertirán en un granulado grasoso y hasta en una pasta.
- Hacer una mezcla de nueces y frutas secas y usar como granola.
- Mezclar a la masa de pan, galletas o bisquets unas cucharadas de nueces y frutas secas antes de hornear. (Como en este delicioso pan de nueces y chocolate)
- Agregar nueces o frutas secas a mousses, yogurts, ensaladas, salsas de carne, guisados, moles y hasta a la carne molida para hamburguesas y albóndigas.

Sobre las frutas secas
Si la fruta es secada en el punto exacto de su madurez, logrará desechar la mayor parte de su humedad, acumulará los azúcares naturales y se conservará, prácticamente, para siempre. Esta técnica y el secado al sol son aplicados por la gente del Oriente Medio desde hace más de 5,000 años. Otro método empleado en la edad media, y aún en nuestros días, es el secado de la fruta al horno, rebanada, ensartada en cáñamo y colgada en las cocinas o alacenas al secarse en un proceso natural.
Botánicamente hablando, se llaman nueces a los frutos de una sola semilla, de cáscara recia y seca que debe ser quebrada para abrirla. Sin embargo, el término se usa para denominar frutos o semillas con pepita comestible encerrada en una envoltura dura o fibrosa. Su empleo en la alimentación data de tiempo inmemorial. En México era común el empleo de cacahuates y pepitas, entre otros, mucho tiempo antes de la conquista.