Los comales de Villa, comida mexicana en Polanco

Cuanto gusto da encontrar proyectos buenos, accesibles, y a manos de jóvenes. Este es el caso de Los Comales de Villa, uno de los nuevos restaurantes de comida mexicana en la Ciudad de México, específicamente en Polanco, en donde definitivamente no hace falta oferta gastronómica pero si hacen falta lugares casuales, familiares, a gusto como este rinconcito al aire libre.

Los Comales de Villa es el proyecto de Natalie Nakash, de familia restaurantera, apasionada de la cultura oaxaqueña y del buen comer. De hecho, los comales de Villa surgió después de una larga estancia en Oaxaca, donde la comida tradicional enfocada en el producto es la norma. Inspirada por la atención al detalle y el respeto a la mexicaneidad de los oaxaqueños, Natalie regresó a transformar lo que solía ser el garage del Villa Maria en una barra de maíz, un restaurante con una carta enfocada en los platillos elementales de nuestro grano nacional: tacos, tlayudas, tostadas, tamales, tetelas, étc,.

El menú de este restaurante mexicano cambia según la temporada para incluir los ingredientes propios de cada estación, ofreciendo los platillos más frescos y de mejor calidad posible. Eso si, todos son productos nacionales, incluidos los cocteles (predominan los de tequila) y las cervezas artesanales.

A cargo de la cocina y de la carta se encuentra el chef Juan Carlos, cuya especialidad es la comida mexicana y quién lidera al equipo de la barra abierta; la cocina es pequeña y su estrella es el gran comal de barro. Todo está completamente abierto al público, para salivar mientras se ponen a hacer sapitos las tortillas o se montan las tlayudas.

Las estrellas del menú son el taco tatemado de aguacate o de setas al pastor, el tamal de esquites o el de plátano con mole de Xico, la tetela del día y la ensalada de nopales curados con aderezo de piloncillo y maracuyá, o la favorita de Natalie, la flauta de flor de jamaica. Sin embargo, a mí lo que más me gusta de la carta de Los Comales de Villa no es un platillo específico, sino la capacidad de proponer platillos originales y auténticos en una comida aparentemente sencilla y bien conocida por nosotros; la mexicana. ¿Como innovar en un taco o en una ensalada de nopales? Misión cumplida.

Además de la oferta de comida Los Comales de Villa estrena también menú de desayunos para los fines de semana, con los básicos mexicanos complementados con jugos, frutas, mousse de yogurt, y otros platillos ligeros o por barbacoa de hoyo para los que prefieren algo más sustancioso, ideal para brunchear.

El ambiente es relajado, casual, completamente al aire libre pero bien techado. Aunque no hay salón, la terraza directamente en contacto con la barra de maíz y el comal hacen un lugar muy agradable, ideal para comer un taquito rápido entre semana o para quedarse a disfrutar del postre (como el tamal de chocolate o el churro relleno de helado) con una sobremesa de carajillos de tequila. Los Comales de Villa es de esos pocos lugares pet-friendly, a gusto y no pretenciosos de Polanco que bien merecen estar guardados en la lista de restaurantes de cualquier foodie.